Diferentes historias, a cada cual más absurda y surrealista, componen esta comedia negra francesa que usa como hilo conductor un peculiar grupo de superhéroes que no tiene desperdicio. En todo momento las risas están garantizadas, con situaciones rocambolescas y desternillantes llevadas al extremo donde se crítica algún aspecto diferente de nuestra sociedad o del comportamiento humano, aunque sin intención de aleccionar a nadie. Y lo mejor de todo, condensado en poco más de hora y cuarto para que el tiempo pase volando, el humor no nos dé un respiro y de vez en cuando nos salpique una buena cantidad de hemoglobina. No se puede pedir más.
Mi puntuación: 6/10
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