miércoles, 31 de julio de 2024

El silencio de un hombre

Aquí éramos más listos, aun lo somos actualmente en numerosas ocasiones, que directores, guionistas y productores, por eso y en aquel 1967 le pusimos a la producción francesa "Le Samouraï" el rimbombante título de "El silencio de un hombre"; como Alain Delon apenas dice cuatro palabras pareció que encajaba perfectamente. En fin, cosas veredes.

Alain Delon encarna a un metódico y frio asesino profesional traicionado por sus contratistas y dispuesto a todo por desenmarañar el embolado. El destacado cineasta Jean-Pierre Melville encaró el reto elaborando un ejercicio de estilo que en su momento tuvo gran repercusión y que ha sido una influencia notoria posterior. Ese sicario del que lo desconocemos todo es el personaje paradigmático tantas veces visto en el cine, un samurái como el título original define con un férreo código profesional y moral, muy reservado, casi mudo, y preparado para cualquier encargo sin dejar rastro. Delon le da presencia y prestancia perfectas, de hecho, el carácter de su interpretación es el núcleo de toda la película, mientras que el guion importa algo menos -hay bastantes incongruencias que el espectador ha de obviar-, lo sustancial es el aspecto formal que Melville maneja con esmero y maestría. Puede no ser una obra redonda, pero su atractivo es innegable.

Puntuación @tomgut65: 7/10



No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Muchas gracias por comentar!

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.