Transmitir en pantalla grande el horror y la locura que H. P. Lovecraft impregnaba en sus relatos es un reto harto complicado, y podemos afirmar que en esta película lo han conseguido con creces. En sus primeros compases hay que reconocer que parece que estemos ante una producción de estar por casa, pero conforme avanzan los minutos y se empiezan a desatar, tanto los alienígenas como el propio Nicolas Cage, la cosa se anima de un modo realmente terrorífico. Y es que a pesar de la limitación escénica, la ambientación es espectacular visualmente, y los engendros que nos presentan solo tendrían cabida en nuestras peores pesadillas . Poco más se puede pedir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Muchas gracias por comentar!
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.