Guste más o menos, una nueva película del director Paul Thomas Anderson es motivo de alegría cinéfila, y si como en el caso que nos ocupa tiene el autocontrol suficiente para no desvariar demasiado el resultado puede llegar a ser, y de hecho es, más que satisfactorio. Esta vez se adentra en su propia vida para contarnos una historia corriente amor y desamor, sencilla de entender, y con personajes, que aunque se comporten de vez en cuando de manera excéntrica, resultan cercanos, mérito sobre todo del desparpajo y la naturalidad de sus joven dúo protagonista, acompañados de varios veteranos que dan empaque al reparto. En resumen, no es una obra maestra pero resulta simpática e incluso fácil de ver pese a sus dos horas y cuarto de duración.
Mi puntuación: 6/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Muchas gracias por comentar!
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.