Varios capítulos de una serie francesa unidos entre sí por una narradora obligada a enrollarse como cuentacuentos para salvar el pellejo, una especie de Twilight Zone centrada en el terror y apta, como la clásica, para un público amplio. Por lo tanto, las limitaciones en sangre y violencia son ineludibles, y la presencia del humor también. Todos los segmentos gozan de la misma factura técnica y no caben objeciones en ese aspecto, en cambio, los niveles de las historias son como dientes de sierra, suben y bajan el interés y la originalidad dependiendo del acierto e inspiración de los guionistas. Ni vamos a negar que se ve con agrado, ni la podemos recomendar a exigentes y exquisitos, es solo para pasar un ratito entretenido.
Puntuación @tomgut65: 5/10
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