Nuestro segundo año asistiendo a este fabuloso festival de cine nos ha dejado con sensaciones todavía mejores que las de la edición pasada.
En primer lugar nos han gustado mucho más las películas que se han proyectado y creemos que la calidad también ha aumentado considerablemente con títulos muy variados y que denotan un gran trabajo y esfuerzo a sus espaldas. Prueba de esto es que de las diecisiete películas que hemos visto, catorce de ellas de la sección oficial, sólo hemos suspendido cuatro, lo cual tampoco significa que no hayamos disfrutado viéndolas, si no que simplemente no nos han gustado tanto como otras.
Aquí podéis consultar nuestra cobertura del festival: Cobertura Terrormolins 2015
Además en la maratón de este año los títulos elegidos han sido mucho más adecuados y amenos para una sesión de doce horas seguidas de cine, en los que primaban la carnaza y las risas, algo que se agradece muchísimo para mantenerse en vilo durante la madrugada.
Si a todo esto le sumamos un trato por parte de la organización lleno de atenciones y muy amable con los miembros de la prensa que asistimos, familiaridad y cercanía entre el público y los trabajadores/voluntarios, promociones, concursos, regalos, talleres, charlas y todo ello a un precio ajustado y accesible, la conclusión es que estamos ante uno de los mejores festivales de cine del país al que no dudaremos en asistir año tras año mientras la vida nos lo permita.
Nuestra más sincera enhorabuena a los responsables de Terrormolins, quienes merecen más reconocimiento del que reciben, y que esperamos nos deleiten y asusten durante muchos años más.
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