El universo multidimensional es un recurso temático cada vez más recurrente en el fantástico y sirve, además, para mantener en el candelero a superhéroes excesivamente explotados en el cine y la televisión, pero también para las comedias románticas, dramas existenciales o, como en el caso que nos ocupa, un psychothriller de manual saltando de realidad paralela en realidad paralela. Hecha con cuatro dólares y mucha, pero que mucha convicción, tiene los ingredientes que darán cumplida satisfacción tanto a los friquis de la sci-fi como a los amantes del suspense -término que por desgracia se ha quedado viejuno- con una trama de venganza femenina que dará también placer reivindicativo a las damas presentes en el patio de butacas, los sillones hogareños o dónde se tercie. La conclusión: sin ser despampanante sí es muy disfrutona y nos deja con las ganas de hacernos con una de esas máquinas salta dimensiones que muestra la película, sería la leche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Muchas gracias por comentar!
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.