Desde Italia nos llega este drama romántico que gira en torno a dos personas maduras que están a vueltas con la vida. Ambos arrastran traumas del pasado que condicionan su relación y que iremos conociendo superficialmente a lo largo de la película, aunque más de él que de ella. Precisamente, el personaje que interpreta Valeria Golin, de un modo natural y desenfadado, es el que ofrece los mejores momentos, tiernos a la par que sobrecogedores, en una película, que aún resultando un tanto predecible, despierta el apego suficiente con el espectador para mantener nuestro interés por los acontecimientos hasta el desenlace.
Mi puntuación: 6/10