Falso documental que parodia reportajes deportivos hiperbolizando el partido más largo de la historia del tenis, aunque por desgracia se pasa de frenada en un intento de resultar gracioso. Y eso que empieza bien, con sus protagonistas masculinos caricaturizando dos contrapuestos personajes, que una vez presentados, solo son capaces de ofrecernos gags alargados hasta la extenuación con chistes obscenos carentes de originalidad que a duras penas hacen reír. Por suerte este ficticio partido solo dura cuarenta redundantes minutos que ni siquiera el carisma innato de sus dos actores consigue salvar.
Mi puntuación: 3/10