Superando los prejuicios iniciales y a pesar de su guión nada original y muy previsible, conforme avanzan los minutos y gracias a varios "gags", la película consigue parte de su objetivo de hacer reír en muy contadas ocasiones. Los principales responsables de esto son los dos protagonistas, quienes tiran de su habitual desparpajo para compensar los vergonzantes momentos escatológicos y las demasiado habituales situaciones sin sentido que empeoran esta comedia que tira por enésima vez de la premisa "cambio de cuerpo" que solamente funciona en muy contadas ocasiones.
Mi puntuación: 3/10
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