Supongo que la intención de Álex de la Iglesia era hacer una película grotescamente loca en un contexto conflictivo, pero en mi caso, y a diferencia que con la gran mayoría de sus películas, no he conseguido entrar en la historia de ningún modo. Su alocado argumento y algunas situaciones demasiado hiperbolizadas me perturban e inquietan hasta límite insospechados, culminando en un epílogo realmente brutal, por decirle suavemente. Puede que Álex haya rodado una obra maestra demasiado absurda o inteligente para mí, o que mi fobia a los payasos me haya pasado factura, sea como sea el resultado final no me convence. Alguna vez tenía que pasar..
Mi puntuación: 4/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Muchas gracias por comentar!
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.