Corre Lola, corre

Hiper vitaminado largometraje alemán que desde el primer segundo ya deja bien claro que no va a contarnos algo corriente, ni lo va a hacer de manera convencional, y mucho menos tranquila, ya que una vez que se da el pistoletazo de salida a la historia apenas hay un par de pausas rítmicas. Además, a lo largo de esta contrarreloj física y narrativa, condensada en apenas hora y cuarto, se irán cruzando diferentes personajes secundarios con problemas propios que afectan, directa o indirectamente y de un modo muy bien encajado, a las tramas principales protagonizadas por una Lola cuyos dolores de cabeza se convierten en un apresurado e insólito esparcimiento.

Mi puntuación: 7/10