Cinco han sido los cortometrajes finalistas de la VII Edición de los Premios de Cine y Series Blogos de Oro 2020, y nuestro blog, como parte del comité que los seleccionó, tuvo un duro trabajo, ya que el número y el nivel de todos los candidatos era enorme, lo cual otorga aún más mérito a que estos cinco hayan sido los escogidos. A continuación os hablamos brevemente de cada uno de ellos.
"(F)Our Seasons" de Miguel Gabaldón
Sin palabras, y solamente a través del lenguaje visual, conocemos la historia de cuatro parejas que viven situaciones originales a la par que cotidianas, en un cortometraje que consigue llegar al corazón y sorprendernos por partes iguales. Todo el conjunto funciona gracias a una sólida realización y a unas actuaciones rebosantes de naturalidad.
"Casiopea" de Fernando Manso
Una obra de arte hecha corto que transmite a la perfección una sensación única y vital. El trabajo de fotografía es una maravilla, además de la elaborada coreografía que lleva a cabo su actriz protagonista, que con la única herramienta interpretativa de su cuerpo consigue calar hondo en el espectador dejando nuestras mentes en esta shock hasta el final.
“La Tierra llamando a Ana" de Fernando Bonelli
El corto con más diálogos de todos aunque nos entren a través de los ojos. Una historia realmente completa comprimida en unos pocos minutos y que logra que nos identifiquemos con las dos partes implicadas, lo cual sería imposible sin la brillante interpretación de un dúo protagonista que sabe como robarnos el corazón y dejarnos sin palabras.
“Moros en la costa" de Damià Serra
El toque cómico de este quinteto, aunque no por ello intrascendente, ya que el mensaje cargado de crítica social está presente en todo momento, además de los enredos y confusiones que nos llevan de un estado emocional a otro hasta dejarnos totalmente boquiabiertos y algo indignados mientras nos han hecho pasar un muy buen rato.
“Saber Perder" de Sergio Milán
Interpretaciones contenidas, música preciosa que pone la piel de gallina y un montaje raudo y ajustado para contarnos una vida entera en apenas un instante. Todo ello plasmado sin dramatismos a través de un vínculo con el que muchos se podrán sentir identificados, y con el que es imposible no conmoverse.