Como si de un circo se tratara, el mero espectáculo y divertimento son el objetivo principal de esta película que no engaña a nadie y que,
para bien o para mal, ofrece lo que uno espera de ella. Llena de
tópicos y momentos que nos recordaran demasiado a otras de romanos o
catástrofes, llegado el momento cumbre todo queda atrás
convirtiéndose en una vorágine sin freno de caos y efectos visuales
a mansalva. La historia y el grupo de actores que aparecen en
realidad no importan mucho, pero nos servirán para llegar hasta un
final que al menos es convincente.
Mi puntuación: 5/10